Quienes seguimos a Taylor Jenkins Reid nos hemos enamorado de sus historias por el universo de farándula ficticia que presenta y cómo cada uno de sus libros se conecta con otro. Esta no es la excepción, pues los protagonistas de esta novela son los hijos de Mick Riva, uno de los maridos de Evelyn Hugo en Los siete maridos de Evelyn Hugo. He de decir que este es mi libro favorito de la autora. ¿Por qué?

¿Por qué los hijos del cantante más famoso del mundo merecen tener su propia historia?

La novela inicia en 1983 con Nina Riva, de 25 años, una surfista famosa que se prepara para la fiesta del año de la que todo el mundo está hablando y que será esa noche en su mansión en la costa de Malibú. Debería ser un día especial, pero no para ella, porque lidia contra el reciente abandono de su esposo y el escrutinio público.

Lo único que la conforta es que sus tres hermanos menores llegarán en unas horas, como lo han hecho los últimos tres años que ha dado la fiesta: Jay, un surfista de talla mundial; Hud, un camarógrafo reconocido y, la menor, Kit, quien se abre brecha en el mundo del surf.

Las personan saben que son hijos de Mick Riva, la estrella musical más famosa del siglo. Han dado por hecho que nunca les faltó nada, que siempre la tuvieron fácil, que nacieron en cuna de oro, unos nepobabys suertudos pero... ¿Y si eso solo es una suposición sin fundamento? ¿Y si su vida no fue el cuento de hadas que todos creen? ¿Y si hubo hechos de su infancia que están a punto de explotar esa noche mientras la fiesta se sale de control?

Es entonces que la autora alterna el presente y el pasado de los hermanos Riva para explicarnos por qué son lo que son y cómo su infancia afectó sus vidas.

¿Por qué es una historia poderosa?

Se centra en las dinámicas familiares, el papel dentro de un hogar y cómo esto influye en las decisiones de la vida adulta.
Al ser personajes famosos nos presenta una realidad que en ocasiones dejamos por un lado: el hecho de que siguen siendo personas que sufren y sienten, como todos.
El ritmo es rápido, ágil, pero con el número justo de descripciones que te sumergen en el ambiente. Es casi como si en cada escena estuvieras al lado de los Riva observando.
La prosa tiene un toque de humor negro muy bien nivelado.
Siempre está pasando algo.
Tiene momentos que te hacen cuestionar la manera en que vives y lo que permites.

Sin duda, se convirtió en mi novela favorita de Taylor Jenkins Reid por el hecho de que Nina me recordó a mi hermana mayor, quien muchas veces tomó el rol responsable de la familia mientras mis papás construían su negocio. Además, me ayudó a darme cuenta de lo mucho que otros se han sacrificado por mí y a veces ni siquiera lo noté.

Definitivamente le di cinco estrellas.

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