«Caperucita Roja y el Lobo», de Roald Dahl
Caperucita Roja, de los Hermanos Grimm, es el cuento que más me aburría cuando era niño porque lo escuché en un sinfín de versiones similares. Sin embargo, puedo decir que hay una de ellas que me saca la risa, que me gusta, precisamente porque fue escrita por el rey del humor negro infantil: Roald Dahl. Y me refiero a Caperucita Roja y el Lobo, uno de los que aparecen en Cuentos en verso para niños perversos.
En esta edición en formato de álbum ilustrado nos presentan el cuento de una forma muy viva, mas la forma en la que se relata y el final es lo que más resalta.
Usa la fórmula del cuento…
PERO con muchísimo humor, especialmente porque la historia se burla de sí misma, sin tomarse en serio, reconociendo que el lector ya se la sabe. Y lo que la hace tan memorable, a pesar de su extensión corta, es que tiene un final difícil de superar, políticamente incorrecto, un poco atemorizante y que muestra un matiz distinto de Caperucita…
Las ilustraciones de Adam Larkum le dan el toque extra y vivo que le falta a la versión de la antología. Con un estilo caricaturesco, una paleta saturada aunque no chillona y una abundancia de texturas con luces, brinda escenas inmersivas en las que el lector se siente adentro del cuento por las distintas perspectivas que se muestran.
Otro factor que refuerza el enfoque original de la historia es que la abuela no luce tan anciana como uno la imagina, y la apariencia de Caperucita es desenfadada, cínica, lo que complementa su actuar al final del cuento.
¿Es un álbum ilustrado?
No. Rasca el álbum ilustrado por la dimensión y el diseño, pero las ilustraciones reflejan lo que el texto dice, convirtiéndose así en un libro ilustrado.
Es ideal para un niño que está en la franja de primeras lecturas, porque tiene alrededor de doscientas palabras y una musicalidad curiosa, sin olvidar que es un cuento que forma parte del colectivo imaginario global.
Así que, si estás buscando un cuento clásico pero con un giro cómico e ilustraciones con guiños a otros cuentos —como la de arriba—, Caperucita Roja y el Lobo, de Roald Dahl, es el indicado.
¡A que no imaginas lo que le pasa al lobo al final! Esta Caperucita es una caja de sorpresas.